La vitamina C se necesita para el crecimiento y reparación de tejidos en todas las partes del cuerpo. Se utiliza para:
Formar una proteína importante utilizada para producir la piel, los tendones, los ligamentos y los vasos sanguíneos
Sanar heridas y formar tejido cicatricial
Reparar y mantener el cartílago, los huesos y los dientes
Ayudar a la absorción del hierro